Los modelos de las residencias para adultos mayores fueron desarrollados desde hace varios años en Europa y Estados Unidos para convertirse en modelos sociales que permitan poder socializar con personas afines a ellos: edad, intereses, vivencias, etc. Estas residencias se han ido sofisticando con el paso del tiempo en todos los países para ir ofreciendo mayores beneficios a las personas mayores.
En México, este tipo de residencias para adultos mayores son modelos nuevos que tratan de erradicar la cultura del falso abandono a los padres cuando han llegado a la tercera edad. Sin duda, nuestro país siempre se ha preocupado por sus adultos mayores, pero la mejor forma de demostrarlo es brindándoles la oportunidad de seguir reactivando su vida social y ayudándolos a contar con todo lo que necesitan . Además, existen diferencias entre cuidar a una persona mayor en casa y el que la cuiden en una casa de retiro.
La vida en México también está cambiando y las rutinas se están volviendo diferentes. Hoy, los hijos tienen que salir a trabajar y encontrar a personas de confianza que puedan cuidar a sus familiares se ha convertido en una tarea muy complicada. Esto ha provocado que más personas mayores tengan que estar solas en casa y que pasen mucho tiempo viendo la televisión o durmiendo, lo que trae consecuencias en su estado de ánimo e incluso en su salud mental.
Una residencia, tal como se mencionó, es un modelo social que promueve la socialización entre las personas mayores con otras personas afines a ellas. En Belmont Village, por ejemplo, nuestro programa de Assisted Living está diseñado para adultos mayores que están bien cognitivamente y pueden tener más independencia y autonomía. Puede que requieran ayuda o no para sus actividades de la vida diaria, pero mantendrán su independencia rodeados de personas afines a ellos con quienes tejen lazos de amistad y acompañamiento.
Dentro de nuestra residencia para adultos mayores, uno de los trabajos más importantes que realizamos son las actividades a través de un calendario en el que las personas mayores trabajan su cuerpo, mente y espíritu. Lo que se busca es que todos los residentes en todo momento tengan labores útiles y relevantes. Estas se realizan en grupos para poder fomentar la convivencia. La convivencia social hace que la gente se sienta bien, que esté motivada.
Una de las ventajas de Belmont Village es que son nuestros propios residentes los que se alientan entre sí para completar sus actividades y pasar momentos juntos. En una residencia para adultos mayores no se permite que alguien se sienta solo, porque están ocupados haciendo actividades entretenidas en compañía de personas de la misma edad y capacidad.
En nuestra experiencia, hemos podido comprobar cómo personas mayores que llegan a nuestra residencia con algún tipo de depresión o que se sentían muy solos en casa, simplemente reviven. Empiezan a tener tareas que dependen de ellos, no dependen de otras personas para poder pasar un buen momento. Ellos deciden a qué clases si quieren entrar o si prefieren quedarse en el bistró o la terraza tomando un café o jugando ajedrez con sus nuevos amigos.
Además, todo el equipo que colabora en Belmont Village está capacitado para ofrecerle atención en todo momento. Y si desean salir a comer o los familiares quieren visitarlos todos los días para comer juntos, pueden hacerlo.
Si usted quiere comprobar el amor de casa y el cuidado de expertos que abraza a nuestra hermosa comunidad, lo invitamos a ponerse en contacto con nosotros para brindarle más información.